domingo, 5 de febrero de 2012

Lady Almina y la verdadera Downton Abbey: El legado perdido de Highclere Castle por Lady Fiona Carnarvon



DATOS TÉCNICOS:

LADY ALMINA Y LA VERDADERA DOWNTON ABBEY. EL LEGADO PERDIDO DE HIGHCLERE CASTLE(Lady Almina and the real Downton Abbey. The legacy of Highclere Castle, 2011)
Fiona Carnarvon
Editorial Suma de Letras
© Lady Fiona Carnarvon, 8ª Condesa de Carnarvon, 2011
© Santillana Ediciones Generales, 2011
Traducción de María del Mar López Gil
1ª Edición

Género y tags: Biografía, nobleza, Historia de Inglaterra, Época Victoriana, Costumbrismo, Clases sociales, literatura inglesa
ISBN: 9788483653050
316 Páginas 





ARGUMENTO:

“Downton Abbey” es una de las series de televisión más populares del momento. Su acción transcurre en una mansión de la campiña inglesa que no es otra que Highclere Castle. Este entorno pertenece a la familia del conde de Carnarvon.
 
Lady Fiona Carnarvon está casada con el quinto conde de Carnarvon. Ella es la que nos presenta la historia de Highclere Castle y de una de sus propietarias más importantes: Lady Almina.
 
Lady Almina era hija ilegítima de uno de los banqueros más importantes de la Europa de finales del siglo XIX: Alfred de Roschild. Ella fue su única hija y heredera, y su fortuna hizo que se fijara en ella el quinto conde de Carnarvon con quien se casó a los 19 años.

Lady Almina no sólo transformó Highclere en un hogar sino que también lo convirtió en un imporante punto de encuentro para las principales personalidades de la política británica del momento.
 
A lo largo de este libro, ilustrado con fotografías, Lady Fiona Carnarvon nos acerca a una época muy especial permitiéndonos adentrarnos en los muros de esta célebre mansión y conocer a sus verdaderos habitantes.
 



OPINIÓN PERSONAL:


Una de mis series de televisión favoritas es la británica "Downton Abbey". Desde siempre me han gustado este tipo de series de época ambientadas en la época victoriana y a principios del siglo XX. Así que, cuando ví en el catálogo de novedades de Suma de Letras este libro no me lo pensé dos veces y se lo solicité a Anika entre libros para hacer su reseña ( página en donde está publicada la reseña original).

Como he comentado, ha sido la editorial Suma de Letras la que se han encargado de lanzar este libro dentro de sus últimas novedades. Pero  antes de nada hay que decir, pese a lo que indica en su ficha la editorial Suma de Letras, que Lady Almina y la verdadera Downton Abbey: El legado perdido de Highclere Castle no es una novela ni victoriana ni histórica. Es más bien una biografía, la de Lady Almina Carnarvon, quinta condesa de Carnarvon, y de la casa que habitó: Highclere Castle.
 
Esta mansión es de sobra conocida por los seguidores de la serie de televisión “Downton Abbey” puesto que es en ella donde se lleva a cabo gran parte del rodaje de la misma. Una impresionante mansión con una historia bastante impactante y de la que nos hace partícipes Lady Fiona. Y, lógicamente, el enorme éxito que la serie está teniendo ha sido la causa principal para que se publique en nuestro país este libro escrito por Lady Fiona Carnarvon. Pero que nadie se lleve a confusión: en el libro no se habla de Downton Abbey (que no existe) sino de Highclere Castle. 


 ¿Y qué encontramos en él? ¿ Es bueno? ¿Merece la pena ser leído?


 
El libro no está mal. Su lectura me ha resultado de lo más curiosa y entretenida. A mí me encanta la serie así que sentía muchísima curiosidad por conocer más detalles acerca de esta mansión y de sus verdaderos habitantes y he de decir que no me he sentido decepcionada. Al contrario: he disfrutado de su lectura. Lady Almina y la verdadera Downton Abbey: El legado perdido de Highclere Castle es un libro del que se pueden extraer muchas conclusiones y en el que la parte histórica está muy presente. Una Historia en la que la documentación salta a la vista. No es de extrañar, ya que como actual inquilina de la casa, Lady Fiona tiene a su dispiosición el archivo familiar y puede conocer de primera mano todo lo de que los muros de la mansión fueron testigos.



Pero el libro no es un mero repaso a la casa sino que es algo más.

 
Es, al mismo tiempo, un buen retrato de una parte la sociedad inglesa de finales del siglo XIX y principios del XX: la clase alta. A través de Lady Almina llegamos a conocer las intrigas familiares, las relaciones entre los distintos miembros de la nobleza británica, la férrea división de clases que había y que se notaba sobre todo en las grandes mansiones como esta donde los criados tenían su propio espacio (en la zona baja) diferenciado de la de los señores (la alta). Diferencia de clases que, y me ha sorprendido, existía entre los propios criados: un mayordomo, por ejemplo, gozaba de un estatus y de unos privilegios que no tenían las fregonas o pinches de cocina. Y una división que, como podemos apreciar también en la serie, la tenían asumida.
 
En todo momento, Lady Almina es presentada como alguien especial. Lógicamente, tratándose de una antepasada de la actual condesa de Carnarvon, hay bastante subjetividad en todo lo relacionado con ella. No obstante, me ha sorprendido y agradado conocerla. Lady Fiona la muestra como una persona cercana, amante de la moda francesa (podría decirse que era una auténtica “fashion victim” de la época), con una inquietud cultural que le llevó a apoyar a Howard Carter y sus excavaciones en Egipto, una mujer que no dudó ni un instante en abrir Highclere Castle a los soldados heridos en la Gran Guerra ejerciendo ella misma de enfermera. No es igual, pero hay varios rasgos del personaje de Lady Cora Gradmanth en ella, se nota que a la hora de crear el personaje los guionistas se han inspirado un poco en ella.
 
Lady Alimina responde a lo que se esperaba de una dama de la alta sociedad británica. Ella muestra este lado cálido pero también tiene uno bastante frío y sorprendente: cuando es madre no duda en delegar la crianza y educación de sus hijos a niñeras y criadas, es más, no establece vínculos muy afectivos con ellos aunque, cuando crecen, las cosas cambian un poco y si que se muestra más unida a ellos especialmente a su hija Evelyn ( aunque ella siempre se sintió más unida a su padre Lord Carnarvon).





Otro personaje a destacar es el del propio Lord Carnarvon. Él se casa con Lady Almina por dinero ( está casi arruinado) pero luego demuestra afectos y cariño hacia ella. De Lord Carnarvon me ha llamado la atención su afición y amor hacia Egipto. Estamos en los años 20, la arqueología era para muchos británicos algo exótico y nuevo, las expediciones eran bastante frecuentes. Lord Carnarvon se hace muy amigo de Carter y apoya en todo momento sus excavaciones a las que acude muy a menudo en compañía de su hija Evelyn. Poco a poco logró reunir una importante colección de piezas egipcias que más tarde, cuando falleció, fueron vendidas al Metropolitan Museum de Nueva York por su viuda. Una muerte, esta de Lord Carnarvon muy relacionada con la famosa maldición de Tutankamon. ¿Por qué? Bueno, hay que leer el libro para saberlo.

 
La edición que ha hecho Suma de Letras está muy cuidada. Al texto acompañan una serie de fotografías que nos permiten no sólo conocer el interior de Highclere Castle sino también a Lady Almina. Meterte en la lectura de este libro es, también, hacer  un viaje al pasado y adentrarte en la década de los años 20, en la historia de la primera mitad del siglo XX. Ha sido esto lo que me ha hecho disfrutar de su lectura. 



Teniendo en cuenta, y a pesar de ello, que Lady Fiona está emparentada con Lady Almina en general se aprecia objetividad. No sé si se lo hubiesen publicado en nuestro país de no ser por el éxito de la serie y hubiese sido una lástima porque es muy curioso. Tiene detalles domésticos que acercan y permiten conocer mejor cómo vivían en esta época. Detalles como la descripción minuciosa de los vestidos de Lady Almina, la mención a las revistas de moda que leía, el menú con el que agasajaba a sus invitados, la etiqueta....

 
Lady Almina y la verdadera Downton Abbey: El legado perdido de Highclere Castle es un libro que se deja leer. Es curioso. Sólo por ese retrato tan fiel que hace de la sociedad británica vale la pena leerlo.