viernes, 21 de mayo de 2010

Tú a París, yo a San Francisco

Ya s abía yo que la buena racha lectora iba a detenerse de un momento a otro ( y espero sea transitorio). Después de los novelones que me he leído le ha tocado el turno a una novela que, si bien no está mal del todo, no es de esas que me hayan llevado a un estado de Nirvana puro como me ocurrió con "Soy un gato", más bien me han dejado normal. La he leído, me ha gustado pero nada más.

Esta novela de Guillaume Musso titulada " ¿Qué sería yo sin tí?" ( sí, un título bastante parecido a la nueva canción de Coque Malla) lleva un poco al desengaño y más que nada por la ilustración de la portada. Viendo ese corazón que sobrevuela al Golden Gate podríamos pensar que estamos ante una novela romántica. Sí, hay amor pero no es una novela romántica al cien por cien. Tiene un poco más de thriller aunque, los de la editorial Planeta Internacional, han metido un poquito la pata con el resumen del argumento que dan en la contraportada ya que, al leerlo y leer las primeras páginas, descubres quién es uno de los personajes principales. ¿ Le quita intriga a la novela? Pues un poquito la verdad sea dicha.

Bueno ¿ y quién es Guillaume Musso? Es un autor francés nacido en 1975. Cuando tenía 19 años se fue una temporadita a Nueva York. Su estancia en USA le sirvió de mucho ya que le ha dado materia para escribir varias novelas, de echo creo que en parte el personaje de Martin tiene algunos trazos del propio Guillaume. Yo desconocía a este autor. La Literatura francesa está gozando de bastante fama en nuestro país, junto a los grandes clásicos de siempre están interrumpiedo con fuerza nuevos escritores entre los que destacan Anna Gavalda o Muriel Barbery.  A ellas viene a sumarse Guillaume Musso. Es bueno pero yo lo calificaría a un nivel un poco inferior a sus compatriotas. 

No es una novela, ésta, que se encuadre dentro de un único estilo. He comentado que, por el título y la ilustración, puede incitar a pensar que es una novela romántica. Tiene su parte amorosa pero el thriller está también presente. La historia arranca en el verano de 1995 en San Francisco. Allí está pasando una temporada un chico francés, Martín, que se enamora y vive un apasionado romance con una americana, Gabrielle. El inicio de la novela promete, vemos como Marín y Gabrielle se aman pero no ha habido nada entre ellos. Sólo ella se decide a ir a por él, cuando está a punto de embarcar en el avión que le devolverá a Francia. Armada de valor, le pide que se quede más. Él se queda hasta que ya no hay tiempo y debe volver a Evry ( una ciudad francesa cercana a París). Al igual que en "Tienes un e-mail", Marín organiza una cita con Gabrielle: esa Nochebuena le pide que se reúna con él en Nueva York. ¿ Acudirá Gabrielle a la cita? Pues no os lo digo.

Tras este inicio hay un salto en el tiempo de 10 años y un poco más. No lo dice claro pero da la sensación que el momento presente en 2007. Ahora Martín es un policia en Francia pero no un policía cualquiera sino de la Brigada de Obras de Arte. Va tras la pista de uno de los mejores ladrones de Arte que existen: Archibald. Marín ha estado muchas veces a punto de cazarle pero siempre se escapa. Archinbald, es un hombre de 70 años, que un día desaparece. La pista le sitúa en San Francisco. Allí va Martin. San Francisco, una ciudad que le trae muchos recuerdos. 

¿Y ahora qué hago, cuento un poco más o qué? Archibald es un personaje clave. Una vez en San Francisco, uno y otro ( él, y Martin) van a averiguar que tienen algo en común, algo mucho más importante que un cuadro de Picasso o de Monet: una persona que no cito pero que podéis imaginar quién es. Martin descubre la verdad y ello le hará dudar un poco. En San Francisco también va a reencontrarse con su gran amor y ya no cuento más.

Lo que ha llevado en realidad a Archibald a San Francisco no es sólo el reencontrarse también con una persona muy especial sino una pieza muy valiosa: La Llave del Paraiso, uno de los diamantes más valiosos del mundo. Una pieza única que perteneció a Maria Antonieta y que, las últimas noticias que se tenían de él lo situaban ( por obra y gracia de James Cameron) en las frías aguas del Atlántico junto a los restos del Titánic. Me ha sorprendido ver que este diamante es un objetivo de Archibald y me ha hecho gracia.

La novela tiene 338 páginas, se leen bien. Es una historia que te atrapa al principio pero que tiene bastantes altibajos. No sé, creo que ha sido un error por parte del autor dar o solucionar enigmas tan pronto, ello le resta un poco de interés a la novela sobre todo si vas por la parte del Thriller. La parte romántica resiste un poco pero tampoco mucho más. Los personajes, tanto los principales como los más secundarios, los he encontrado un poco vacíos. Creo que debería haberlos desarrollado un poco más especialmente al personaje de Gabrielle. Guillaume Musso se deja bastantes cosas de ella en el tintero, es uno de los personajes claves pero muchas veces aparece como mera secundaria dando más importancia a otros que, en realidad son los secundarios como Valentine o la dama coreana que contrata a Martin.

Ello hace que la novela cojee un poco. Un poco bastante. Siento ser tan dura pero me daba la sensación de que iba a aportarme más cosas, que iba a resultar más interesante sobre todo viendo que Martin se dedica a investigar robos de obras de Arte.

Tengo la novela en la Biblioteca con el tejuelo N/MUS/que. Imagino que va a tener su público lector este verano. De momento está en la mesita de las novedades. Se deja leer. No puede compararse con otros títulos que han salido esta Primavera pero para pasar un rato no está mal. Es de esas lecturas de " usar y tirar", que lees pero que no sientes ganas de volver a releer. Y es una lástima porque la idea principal era original y daba para mucho más.